Analizar el comportamiento del mercado de reproductores al cierre de cada campaña aporta datos interesantes en relación a las expectativas del sector. Nota por Rosgan.Si bien no deja de ser un ejercicio complejo dada la diversidad de variables involucradas en la compra, realizar el seguimiento de los valores promedio negociados, así como también de los volúmenes de venta, permite tener una referencia de cómo se posiciona el sector en relación a años anteriores y frente a las expectativas futuras del negocio. Claramente, en los últimos dos años el clima ha sido un factor clave en la decisión de compra de un reproductor. La extrema sequía que se registró el año pasado y que volvió a recrudecer durante este otoño-invierno prolongándose hasta la llegada de las primeras lluvias de fines de octubre, afectó severamente la dinámica de este mercado. La reducción de los campos llevó a muchos productores a achicar el número de vientres, obligando a su vez a destinar mayor cantidad de recursos a la suplementación. Esto último ha sido un factor no menor en la asignación del presupuesto de compra y reposición de toros. Si bien desde lo económico, la baja de la inflación y la reducción de tasas que se dio este año contribuyó a mejorar las condiciones de venta ofrecidas facilitando la concreción de negocios, la realidad es que, hasta tanto, el clima no marcó un cambio significativo en el patrón que venía mostrando, el mercado no logró encontrar un mayor dinamismo. Estadísticas privadas que surgen de las ventas de reproductores realizadas en los principales remates y exposiciones del país, reflejan una recuperación de los valores en torno al 20% respecto de los promedios registrados el año pasado, medido en kilos de novillo. Históricamente, el valor medio de un reproductor ha fluctuado entre los 2.000 y 2.500 kilos de novillo. El año pasado, estos promedios terminaron ajustando a pisos de 1.760 kilos lo que significó una retracción del 30% en relación a los 2.500 kilos alcanzados en 2022. En lo que va de la presente campaña, con datos actualizados hasta el mes de noviembre inclusive, el valor promedio de los reproductores logra recuperar terreno posicionándose en un valor medio equivalente a los 2.110 kilos de novillo.

