El taladro adulto se alimenta de la corteza de las ramas jóvenes afectando el normal crecimiento de la planta. “La larva afecta los troncos principales, generando caída de producción, muerte de ramas y en algunos casos la muerte de la planta al pasar de los años”, detalló Kubiszen.
La técnica de captura manual es el método propuesto por el INYM para controlar al taladro evitando el aumento de la población en los años siguientes, y se aconseja hacerlo en las primeras horas del día en primavera y verano. “Debe hacerse en la época de reproducción que es ahora y mejor si es durante las primeras horas de la mañana que es cuando el ambiente ayuda para que estén los adultos, normalmente de la mitad de la planta para arriba”, expresó el técnico.
Cabe destacar que no hay productos habilitados y que controlen este insecto, y cualquier aplicación de insecticida que se realice afecta negativamente a los predadores naturales que controlan a esta plaga, rompiendo el equilibrio natural y dando la posibilidad de que las generaciones futuras de taladro se multipliquen y generen mayores daños al cultivo de la yerba mate.
El INYM promueve la recolección manual de taladro y también el equilibrio natural para el combate de plagas, mediante la incorporación de árboles y cubiertas verdes en los yerbales, multiplicando la biodiversidad y disminuyendo los efectos de las condiciones climáticas extremas. “El estrés de las plantas permite que cada plaga genere un daño mayor, por eso es importante generar un hábitat lo más similar al monte, origen de la yerba mate, ya que a mayor equilibrio ambiental, menos posibilidad de ataque del taladro, rulo, marandová y ácaros, las más conocidas”, resumió Kubiszen.