La aparición de resistencias en malezas hace necesario repensar las estrategias de manejo para prevenir y preservar las tecnologías disponibles.La biotecnología aplicada a los cultivos se convirtió en un pilar esencial para el manejo integrado de malezas. La generación de un cultivo transgénico tolerante a herbicidas lleva muchos años de desarrollo y una inversión millonaria, por lo tanto es imprescindible mantener vigentes estas biotecnologías el mayor tiempo posible. El maíz lídera en cuanto a desarrollo biotecnológico, alcanzando 11 genes introducidos, más un gen sobreexpresado por mutagénesis. La mitad de estos eventos le confieren al cereal tolerancia a herbicidas, mientras que 5 genes resistencia a lepidópteros y 1 a coleópteros. De los 18 materiales existentes al momento, varios de ellos cuentan con 4, 5 y hasta 6 eventos apilados -en el caso de Powercore Ultra Enlist– (Fig. 1). En soja, el panorama es similar, contando con 10 genes introducidos hasta el momento, más un gen sobreexpresado por mutagénesis. A diferencia del maíz, solo 2 de ellos codifican para proteínas con actividad insecticida, mientras que el resto le confiere tolerancia a diversos herbicidas.El abanico de materiales disponibles suma 6 opciones, en su mayoría con 2 eventos apilados, salvo Enlist y Conkesta Enlist que apilan 3 y 5, respectivamente. Fig. 1 eventos biotecnológicos en soja y maíz (Fte: REM y ASA)

